miércoles, 22 de abril de 2009

1994 - Semblanzas inocentes de Mediodía

Acaricia mi corazón

¿Puedes adivinar el color de mi corazón?
Es cierto que un par de luces en la cerveza
era poco brillo sobre tu rostro
pero yo no inventé el destierro de los meses
y lo mucho que hizo de ti el recuerdo
apenas si pude imaginarlo.

¿Puedes ver la forma de mi corazón?
Ya sé que tus brazos estuvieron sobre mis hombros
y cuando ocurrió fui jardín y no tuve
historias para contar, sólo los pasadizos de un edificio
fueron motivo para otra noche sin dormir
lejos y cerca de ti
sumergidos en la ciudad sin fin
que ningún instante podía enternecer

¿Sientes como late mi corazón?
No sé si sabes que la primera vez que bailamos
te tomé por la cintura
y quizás no fue suficiente para recordarte el mar

Un poco de luz no basta para ofrecer una sonrisa
y cuando lo intenté hubieron cientos de cuadras
entre nosotros
Pero tu sabes bien como latió mi corazón cuando te besé
y debes suponer la angustia que deposito en los monumentos
cada vez que te anhelo al tratar de inventar
el reloj que permita un tiempo sólo para ti.

Nada puedo hacer para cambiar de color
para ser tu camino escogido
Sólo la angustia de los finales es certera
sólo tu cabello puede adornar mi cuerpo

Acaricia mi corazón
sólo así dejaré de ser peatón perdido en autopistas
y olvidaré mi lugar
sólo así olvidaré como compartí a la mujer de mis sueños
y olvidaré que fui de ello testigo privilegiado
Toca mi rostro
adórname con tu cuerpo
y sólo así conocerás el brillo de mi corazón.

1 comentario:

Trinity dijo...

Qué tierno poema! Ojalá me cuentes que te inspiró. Sigue escribiendo más poemas son hermosos Slds Trinity